El Pan Dextrin se llama así por el dextrinado, un proceso que lo hace más digerible respecto a una tostada normal. Y también lo hace más resistente, así la tostada no se te rompe por la mitad al primer mordisco. Muchos consumidores lo aman por estas razones. Pero muchísimos no conocían ni su nombre. O no lo recordaban.

En lugar de intentar esconder el problema, hicimos de ello el centro de la campaña. Apostamos por ser auto-irónicos sobre el propio nombre del producto, para hacer que todo el mundo lo recordase. Así nació la campaña “Difícil de pronunciar, fácil de digerir”.

Montamos un shooting de tostadas y con esos recursos preparamos el vídeo principal de la campaña, y muchas otras piezas digitales y offline: materiales de punto de venta, una newsletter, banners, ads de redes sociales y obviamente una landing de producto que explicaba en detalle todos los beneficios del misterioso proceso del dextrinado. 

Y para que también la Generación Z pudiera descubrir los beneficios del pan Dextrin, preparamos una versión del anuncio para TikTok.